Helicóptero del servicio de extinción de incendios, en una actuación en Rioscuro de Laciana
Hay veces que hay que escribir, aunque no se disponga de tiempo para ello. Hay veces que hay que denunciar las miserias de este mundo, aunque sólo se consiga despertar a unos pocos del letargo y de la insensibilidad que se produce al acostumbrarse a ellas. Y hay veces en las que hay que preguntarse por qué algunas barbaridades no cambian y los que tienen en su mano cambiarlas no hacen nada para que así sea.
Dicen que el mes de enero es el mes en que más incendios se producen en el occidente de la cordillera Cantábrica. Parece mentira, pero es verdad. No hay ganado en el monte ni peligro de que el fuego le afecte, y los que queman para obtener pastos reciben unos pocos meses después, al final de la primavera, la cosecha deseada, en forma de brotes tiernos de hierba donde antes había otras especies que el ganado no puede aprovechar. Pero hay más actores provocadores de incendios que aquellos que buscan pastos, como pueden ser cazadores que queman un coto vecino para que la fauna venga al suyo, o que simplemente quieren el monte más limpio para poder cazar menos trabajosamente. Luego están los que queman para elevar su autoestima, ya que difícilmente conseguirán otros logros en esta vida que acaparen la atención de todos y las reseñas en los periódicos. Pero en estas latitudes, estos últimos son los menos.
Incendio sobre las brañas de Susañe, en septiembre de 2009. Medio kilómetro más allá había otro
Este año el invierno no ofreció huecos de buen tiempo en los que quemar, y cuando vinieron, la cantidad de nieve que había en cotas bajas impedía poner el fósforo a trabajar. Así que sólo quedaba el final del verano para pintar de negro el verde habitual de los valles asturianos y leoneses. En agosto ya ha habido algunos incendios pavorosos, como el que quemó en Barjas más de mil trescientas hectáreas. Más o menos al mismo tiempo, por encima del pueblo de Castro, junto a Palacios del Sil, ardieron 130 hectáreas de brezo y alguna de roble; al lado del de Barjas, parece una menudencia, pero cuando se ve de frente la franja quemada bajando desde Villablino, resulta inmensa.
Zona quemada al oeste de La Viliel.la, en agosto del 2010. La franja verde más clara a la derecha de la foto ardió en 2004
También por esos mismos días, ardían en La Viliella 35 hectáreas de monte bajo incluidas dentro de los límites de la Reserva de Muniellos, que tenemos que recordar que tiene mayor categoría de protección que un parque natural, ya que no tienen acceso a su interior ni siquiera los habitantes de los pueblos colindantes. Hace seis años hubo un incendio justo a continuación, mucho mayor, y que llegó a pasar la divisoria hasta el borde superior del bosque de Muniellos. En algún otro momento que no sé fechar, ardía la misma ladera de siempre, en la sierra de Degaña, ésa que cuando no arde por la mitad oeste, arde por la mitad este, y a veces por las dos en el mismo año.
Algunos de los últimos incendios en la sierra de Degaña. En verde, el último, hace unas semanas; en rojo, los dos que hubo durante el año 2009, uno en la primavera y otro en el verano; en negro, otro del otoño de 2005. La que aparece en azul y otras porciones que no se han marcado en colores han ardido también desde el año 2005. Pulsar en la foto para ampliar
El último, del mes pasado. Como siempre en la sierra de Degaña, arde la montaña de abajo arriba; cientos de metros de desnivel
Este fin de semana también hubo espectáculo en abundancia en estas tierras, ya que mientras ya llevaba unas horas ardiendo el monte en Valdeprado, empezaba a hacerlo también sobre el pueblo degañés de Rebol.lal o Rebollar. Este último fuego rebrotó al día siguiente, y a veinte kilómetros de distancia, a las pocas horas una nube de humo de dos kilómetros de altura se elevaba sobre Rioscuro de Laciana. Para los pirómanos era la última oportunidad que se les ofrecía de momento, ya que la previsión del tiempo daba lluvias justo para hoy, lunes. Lo que arda en los próximos dos meses dependerá mucho de las precipitaciones que haya, que es lo único que impide a los de siempre seguir arrasando uno de los últimos paraísos naturales que quedan en la península Ibérica. Sí, sí, he dicho 'lo único que impide', porque por las comparaciones que he estado haciendo entre los incendios de los últimos años, NADA ESTÁ CAMBIANDO.
Ladera encima de Castro, en Palacios del Sil
Incendio en Valdeprado, el sábado 4 de septiembre
Incendios en el Alto Sil, ese espacio natural sin catalogar porque a Victorino Alonso no le interesa -léase que lo que él dice va a misa-, pero que ya iguala prácticamente en población de osos a las mejores zonas oseras de toda la cordillera, y que supera en urogallos a cualquier otra, con diferencia; incendios en el Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, en la misma cantidad que el año pasado, el anterior y todos los anteriores, mientras los turistas caminan por sus montañas viendo columnas de humo por aquí y por allá; incendios en la Reserva Natural Integral de Muniellos, donde no hay más porque su extensión es pequeña; y no sigo, porque sólo me estoy refiriendo a la zona de ámbito de este blog.
Montes de El Rebol.al o Rebollar, recién extinguido el incendio del mediodía del sábado 4 de septiembre
Otra toma de la misma zona quemada
Visto desde otro ángulo
A la mañana siguiente, rebrotó
¿Por qué todo sigue igual? ¿Por qué el mismo número de incendios de siempre? ¿Quién puede parar esto? ¿Yo? ¿Tú? ¿Las cuadrillas de extinción de incendios, que ya bastante se juegan la vida? ¿Los agentes medioambientales, que ven como la mayoría de sus denuncias acaban en un cajón del que ya nunca salen?
No. Los que pueden parar esto están más arriba. Tienen coche oficial, buenos sueldos, comen en los mejores restaurantes, se hospedan en hoteles de cinco estrellas mientras hacen viajes de turismo a la Conchinchina que nos venden como viajes oficiales, y que como con casi todo, han perdido el contacto con la realidad, y lo único que les interesa es conservar su sillón durante el mayor tiempo posible, aumentando números en sus cuentas corrientes lo más rápido posible, antes de que les llegue el relevo electoral.
Incendio en Rioscuro de Laciana, domingo 5 de septiembre. El fuego se inició exactamente en el mismo lugar el 11 de noviembre del 2007
El hidroavión en acción sobre terrenos ya de la Devesa de Robles, un bosque de gran valor ecológico colindante con los terrenos de Rioscuro
Uno de los dos helicópteros que actuaban en la zona
De vez en cuando las llamas alcanzaban cinco metros de altura
Esta foto la he dejado en tamaño grande (pulsar en ella para ampliar) para ver los detalles: robles que ya han ardido y otros a los que les queda un telediario
La columna de humo, vista desde Villaseca de Laciana
Luego hay gastos ingentes de dinero para fomentar el turismo en esos mismos sitios que arden por los cuatro costados ante la vista atónita de esos turistas que se tragaron el anzuelo de que iban a visitar un paraíso natural. No es que no sea un paraíso natural, pero en las fotografías de los folletos no aparece ese porcentaje de territorio que se pinta de color negro todos los años.
País de inútiles
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Tremendas imagenes que nos muestras. Grandes verdades que dices acerca de los responsables de los incendios y la responsabilidad de los políticos corruptos.
ResponderEliminarUna desgracia la que asola esa tierra cada año... y da gracias que se ha reducido algo estos incendios. Recuerdo el verano, creo que fue el del 99 y también el del 2001, cuando ardieron hasta las Médulas y también casi todo el valle de Salentinos... madre mía, qué horror.
Menos mal que ya ha empezado a llover y eso hará que el monte descanse un poco de tanto calor y fuego.
Saludos!
Por desgracia, hoy nos traes una buena colección de fotos. Terribles incendios. Demasiados intereses. Ganaderos, urbanísticos, madereros, a los que sumar la desidia y la simple tonteria cuando no la mala leche.
ResponderEliminarEl monte se ha quemado siempre, con cuidado, pero siempre. Si ahora se prohibe quemar, si ahora hay menos ganado, el monte se hace "monte" y cuando prende ya no hay quien lo pare.
¿que hacer?, no seré yo quien tenga la respuesta mágica, pero no hacer nada no es la solución.
Un saludo
Cienfuegos
Totalmente de acuerdo contigo . Es desolador ver al fuego actuando, y la impotencia que se siente.
ResponderEliminarYo no se que haria a los responsables.....
Echo aun mas culpa a los politicos de turno que a los mismos degenerados piromanos. La mayoria de las veces gente inculta y atrasada sin escrupulos.
Estos politiquillos de mierda estan acostumbrados a que su gestion por mala que sea les salga gratis , y asi estamos como estamos.
saludos.
Estos bosques no prenden solos. Bueno, una señora muy conocida en Villablino nos dice que fue provocado. Provocado, ¿por qué? ó ¿por quién? señora. Todo el mundo sabe que nuestros montes no arden si no hay una mano asesina, terrorista y salvaje que los atice. Los fuegos por estas latitudes nacen de la intención paranoica de unos pocos y la infame política de otros, orientada a gastar el dinero de todos en atajar lo irremediable en vez de orientarse hacia la prevención y protección de nuestro patrimonio natural. Todos sabemos, hasta esta señora que no sabe utilizar el idioma castellano, que aquí los fuegos son intencionados, y que los ejecutan cuatro canallas, que de tener ocupada a parte de la cola del paro de la zona en el cuidado y conservación de los montes, daríamos con ellos enseguida.
ResponderEliminarDiscrepo, los que podemos pararlos, somo mucho más la gente de a pié, denunciando, acosando, formando a los pequeños. Eidentemente, las autoridades, pueden y deben y va siendo hora de exigirles, castigos ejemplares para quien se le pruebe ser provocador de un incendio.
ResponderEliminar¿ dónde trabaja el Seprona para buscar a los culpables? ¿ Dónde vigila, en las carreteras? ¿ en horarios de 9 a 5?
un buen logo sería "Más presión policial y acoso vecinal", proque al final los ecinos, sabemos, quien tira de mechero año tras año......
Por fortuna, no he visto ningún incendio en persona, pero tiene que ser uno de los espectáculos más desoladores. solo con ver las fotos se te encoge el alma.
ResponderEliminarYo siempre me he preguntado quién incendiaba y, sobre todo, por qué. No sólo por qué se incendia sino por qué, desde arriba se permite que se incendie. Como buen conocedor del entorno, supongo que tienes toda la razón al identificar las causas y los culpables directos e indirectos de esta situación. Antes pensaba que era simple indolencia, pero ahora tengo claro que se trata de la peor corrupción que puede existir, la que borra del mapa nuestro entorno natural y, con ello, nuestras raíces a cambio de una mezquina ganancia económica a corto plazo. En verdad, aquí la maldad y la estupidez se alían para prender fuego al bosque. En fin, como siempre, un excelente artículo.
Por cierto, me ha parecido curiosa la ortografía de la "ll" separada por punto "l.l", ¿Cómo se pronuncia?
Saludos.
Gracias a todos por los comentarios. Está claro que con penas más duras, quemar el monte igual ya no saldría a cuenta. Por otro lado, es fundamental la concienciación de la población rural, porque aún hay mucha gente que considera que es NECESARIO quemar el monte de vez en cuando. Y de entre todo ese gran porcentaje de población que lo piensa hay de todo, pero también buenas personas a los que hay que demostrar que el monte se empobrece cada vez más con el fuego y que recuperar la capa fértil de suelo una vez que se la lleva el agua de la lluvia por falta de protección, lleva muchos años.
ResponderEliminarUn saludo
Dizdira: en el extremo occidental de Asturias y zonas limítrofes de León se utiliza la llamada 'che vaqueira' que se pronuncia como una 'ts' y que sustituye a las palabras que habitualmente se han escrito con [ll] o simplemente como [l]. Es más habitual encontrarla empleada como [ch], aunque no es fiel reflejo de cómo se pronuncia. Por ejemplo, en asturiano occidental o patsuezo, Laciana es L.laciana, o Tsaciana, aunque al oído suene como Chaciana. También se puede escribir Ḷḷaciana, Reboḷḷal o La Vilieḷḷa, pero no es fácil sacar del teclado ese carácter. El problema con las dos opciones es que nadie fuera de Asturias o León (o incluso gente de ambas provincias) sabe cómo se pronuncia L.l y Ḷḷ.
ResponderEliminarResultado del incendio de Rioscuro: cien hectáreas. http://www.diariodeleon.es/noticias/noticia.asp?pkid=551701
ResponderEliminarEstaba el pasado domingo por encima de Tejedo de Ancares buscando al amigo peludo (sin éxito una vez más) y me entró la mala leche al ver una columna enorme de humo. Venía de la zona limítrofe de León con Asturias. No sabía exactamente dónde era y ahora ya lo sé.
ResponderEliminarTremendas imágenes las que nos ofreces. La misma desgracia todos los años provocada por los mismos desgraciados. El otro día en una emisora daban el dato de que de los más de 1.200 detenidos por provocar incendios en los últimos 10 años en España solo había a día de hoy 8 en la cárcel. Nunca pasa nada, y lo que dices, los de siempre en el poder que se está muy agusto.
Hubo otro incendio a última hora del domingo en el valle de Fornela, que podría ser quizá el que viste tú.
ResponderEliminarUn saludo
Tremendo y descorazonador, lastima que no ardieran ellos. Bien por denunciarlo y ánimo amigo.
ResponderEliminarEl problema se podria solucionar pero no hay intencion de hacerlo.
ResponderEliminarSupongo que en la zona de Laciana los incendios que se producen son por venganzas o provocados por los ganaderos de la zona, me corriges si me equivoco.
El resultado de esta practica tan estupida es la formacion de un tapiz monoespecifico y continuo de brezo o Urz (Erica australis) , a mas incendios mas regeneracion de este arbusto ,que sirve de mecha para futuros incendios.
Soluciones? si la administracion pusiera cartas en el asunto , se podrian hacer intervenciones forestales, fajas de desbroce,desbroces selecctivos para los ganaderos y otro tipo de actuaciones que dificulten la actividad de los piromanos.
Pero ya se sabe las campañas de incendios de la Junta de Castilla y Leon son solo cara a la galeria , que se lo pregunten a los trabajadores del sector forestal que llevan años trabajando en una condiciones de precariedad que rozan la esclavitud.
Saludos.
El incendio que vi fue en torno a las 10 de la mañana del domingo. Pero lo más probable es que fuera en Fornela porque estaba más cerca el humo que Rioscuro.
ResponderEliminarTejón, lo malo de todo es que los ganaderos que queman el monte no son plenamente conscientes del daño que hacen (a veces creen que no pasa nada con quemar), porque han heredado esa costumbre de sus antepasados, cuando absolutamente todos los vecinos quemaban el monte en alguna ocasión. Al resto de pirómanos no les concedo el indulto, porque no se lo merecen.
ResponderEliminarAmigo del blog de Naturaleza y Medio Ambiente: como ya dices tú con otras palabras, cuando se ve una ladera extensa cubierta de brezo, es que en el pasado se ha quemado una y otra vez, hasta que no ha crecido otra especie. Quien tiene el poder para reducir considerablemente el número de incendios es la administración, bien prohibiendo el uso ganadero o cinegético de las zonas quemadas durante largos periodos de tiempo, o bien alargando las penas de cárcel. Y por supuesto, todo lo que explicas en tu segundo párrafo.
Con respecto a los ganaderos, hay lugares donde un año arde una ladera, al siguiente la contigua, el tercer año vuelve a arder la primera y así sucesivamente. Por allí circula habitualmente un pastor de cabras o el único habitante con vacas en muchos kilómetros a la redonda. Está clarísimo que ha sido él el que le ha pegado fuego al monte y lo seguirá haciendo indefinidamente. Pero no pasa nada, y sigue quemando. No voy a decir aquí que se le encierre hasta que cante, pero igual se le puede ayudar a que no queme, llegando a un compromiso para realizar desbroces en zonas de escaso valor ecológico del entorno, que siempre es mucho menos pernicioso que las llamas. Lo que cuesta llevar un tractor a desbrozar es infinitamente más barato que lo que cuestan las horas de helicóptero e hidroavión que va a haber que pagar después.
Dani: el incendio que viste fue el de Rebollar, que empezó sobre esa hora. El de Rioscuro está mucho más lejos y empezó a las cuatro de la tarde.
Un saludo a los tres
La peste de todos los años por estas fechas.Se echa mucha culpa a los ganaderos,en mi pueblo(Torga.Ibias)no queda practicamente ningun ganadero,y en los alrrededores tampoco,sin embargo nos quemo la semana pasada un pinar de mas de 40 años,y puedo asegurar que los del pueblo no fuimos,pues nos costo mucho repoblar el monte.Nos dicen que fue un rayo,nosotros creemos que fue obra de algun impresentable,por cuestion de limites,evidia o vete tu a saber.Este pinar en cocreto tenia una pista aprobada que esta parada por medio ambiente por una denuncia de los ecologistas,segun la cual es un cantadero del urugallo y paso del oso,de haber estado terminada se podria atajar el incendio en el inicio,ya que el monte(robles y pinos)no tiene acceso por ningun sitio,lo que impidio a los bomberos utilizar las motobombas.Ahora ni cantadero,ni paso del oso.Esta gente que me parece muy bien que defiendan la naturaleza,debian de mirar que criterio siguen para hacer las denuncias,por que la mayoria de las veces es peor el remedio que la enfermedad.Hay que ser ecologista en el monte,no sentado en una oficina en Oviedo cobrando suvenciones,en el monte,repito,es donde se aprende a cuidar la naturaleza(sin aire acondicionado y picado por los tabanos),por desgracia los ecologistas de verdad no los escucha nadie y la administracion la que menos.
ResponderEliminarUna verdadera lacra de nuestra tierra. A las medidas propuestas para su solución me gustaría añadir otra: la criminalización mediática como se hace con otros temas; es decir, que los medios de comunicación trataran este délito como los actos de terrorismo o los delitos contra la "salud pública".
ResponderEliminarComo bien dices todos los años lo mismo, no creo que con echar culpas a políticos, entes, etc., cambie la realidad: año tras año, el monte lo quema la gente que vive ahí, no viene nadie de fuera a quemarlo, reiterados fuegos, de noche, en zonas que solo los lugareños conocen, etc., nadie dice quien es, silencio sepulcral en todos los casos, ya no vale lo del tontuco del lugar, y encima en Barjas pillan al pedáneo, la superficie quemada en este municipio es 3 veces su término ¡¡ todos los años, eso es lo que hay no miremos a las "alturas" que nadie va a venir a regalar nada, es una pena pero es así, no se valora el terreno ("non val nada esto, a ver si queima todo de una vez") sin autoestima y valorando el patrimonio que hay poco podemos esperar.
ResponderEliminarMuy buen reportaje, como todos los que publicas, y con cercanía.
Un babiano serguidor.
Chapras: sí, también hay gente que quema por fastidiar a alguien. Lo que nunca sabremos es cuántos incendios son por pastos, cuántos por venganzas, cuántos por el placer de quemar, o cuántos por accidente, como el de Guadalajara en que murieron 11 bomberos, y que se dice que fue por una barbacoa en un área recreativa, que se descontroló.
ResponderEliminarCarlos: cuando empiecen a arder manzanas enteras de ciudades, como en California o Australia, igual empiezan a tomarse medidas. Es terriblemente cansino ver como hasta que los resultados no son extremos, las leyes no se cambian.
Anónimo: tienes razón en lo que dices, pero los seres humanos tenemos muchas veces la mala costumbre de no hacer bien las cosas si no es por miedo al castigo o al escarnio público. Así que por eso digo que está en la mano de los políticos, y sólo de ellos, hacer entrar en vereda a los que queman, o en el caso de los ganaderos, ayudarles como sea posible para que ya no necesiten hacerlo.
Alto Sil me corriges si me equivoco pero por lo que parece en Laciana hay Juntas vecinales, eso a parte de tratarse de espacios protegidos explica la poca actividad forestal por parte de las subcontratas de la Junta de Castilla y Leon en la zona eso es al menos lo que yo veo.
ResponderEliminarEn relacion a los comentarios anteriores da la impresion que algunos de los habitante de las zonas quemadas han decidido gestionar el monte asi al margen de otras opiniones.
Si las consideraciones medioambientales y turísticas fueran de poco peso, que no lo son, hay como bien señalas una vertiente económica. En una época de crisis como la nuestra se me antoja que deberíamos cuidar cómo empleamos el dinero público, rentabilizarlo al máximo. No hace falta ser economista para corroborar que es más barato un tractor y una cuadrilla durante seis meses que los medios aéreos finalmente utilizados. Si la cuadrilla de limpieza es además de la zona (que reviertan los beneficios de cuidar el entorno en la gente que lo ha cuidado y transformado...) posiblemente ayudaría... Estupendo reportaje.
ResponderEliminarNaturaleza y M.A: Degaña o Cangas del Narcea son Asturias y arden igual o más que Laciana. Yo creo que la base del problema es que quemar un monte no es nada arriesgado penalmente para el que lo quema, porque no se aclara la autoría de prácticamente ningún incendio.
ResponderEliminarMilio: ni siquiera seis meses de trabajo harían falta. Además, ahora que el carbón está al filo del abismo, no estaría de más que recordaran que la naturaleza bien cuidada atrae turismo (no va a crear tantos puestos de trabajo, pero no se está creando ninguna otra alternativa, y los bosques y las montañas ya están aquí; sólo hay que protegerlos).