jueves, 23 de octubre de 2008

Buzongo... y media vuelta


Primera vista de la loma del Pico Buzongo desde el valle de Orallo. La cima no se ve.

El Pico Buzongo es una montaña que sólo existe por uno de sus cuatro lados. Seguramente muchas de las personas que han pasado por su cumbre no tienen constancia de haber ascendido a la cima de una cumbre individual. Precisamente porque por donde pasa el caminante habitualmente, la cumbre del Buzongo no es nada. Se encuentra emplazada entre el Pico Cogollo y el Cogollo de Cebolleo, dividiendo el collado que las separa en dos subcollados y apenas elevándose unos metros sobre ellos. Visto desde la vertiente somedana tampoco hay constancia de tal cosa como el Pico Buzongo. Pero si llegamos desde el sur, claramente ahí está, elevándose por una larga loma de unos dos kilómetros de distancia. Eso sí, cuando llegas arriba, descubres que estás en un collado.


La Poza de la Mochada. Un lugar para el baño... pero ciertamente no ahora

Parece que este otoño es un otoño estándar, a difere
ncia del que tuvimos el año pasado. Ésta es la segunda nevada del mes de octubre. Algo más intensa que la anterior y parece que de momento dura algo más porque los días ya son más cortos y más fríos. En la jornada de hoy teníamos la referencia visual de algunas caras norte de montañas de la Sierra de Gistredo y en concreto parecía haber desaparecido la nieve por debajo de los 1.600 metros de altura. Evidentemente, en cara sur, que era lo que tocaba hoy, esa cota debería estar mucho más arriba. Así que las polainas se quedaban en casa. No es que pesen mucho, pero llevar por llevar, pues tampoco es.


Cogollo de Cebolleo, el objetivo del día. ¡Pero qué pesado es atravesar estos piornos cargaditos de nieve!

Pero al llegar al fondo del valle de Orallo, la cota de nieve estaba a menos de 1.500 metros de altura y ya asomaban las laderas que tocaba ascender completamente cubiertas de nieve, con las típicas manchas de vegetación cuando el espesor no es muy grande. Se ve que las nubes descargaron más en la divisoria de lo que lo hicieron más al sur. La helada que cayó durante la noche debe de haber sido la mayor hasta ahora. En las brañas de Orallo, a las que el sol tarda en llegar, el frío era muy intenso. Avanzando junto al río, a la izquierda, en el tramo más sombrío del recorrido, aparece una poza, que en el mapa de Muniellos de Calecha llaman Poza de la Mochada y cuyo color oscuro da aún más sensación de frío. Cruzamos el río de Orallo por el puente junto al refugio -por cuyo aspecto nunca nos daría la impresión de serlo- y nos plantamos en Marietes de Abajo, donde el valle ensancha en una zona de praderías. Al cruzar de nuevo el río por otro puente para abandonar la ruta de Tres Lagunas y dirigirnos hacia el Puerto de las Zreizales, ya comienza a entrar el sol y nos sobra toda la ropa de abrigo que llevamos. Por aquí andaba ubicado el Chozo Chapa, llamado así por el material con el que estaba techado y del que ya sólo queda el suelo de cemento. No se le echa de menos, la verdad. En este punto el mapa de Muniellos se termina y tenemos que echar mano del mapa oficial. A ver si publican ya el mapa del Alto Sil.


El chozo de Buzongo, con vistas al Cornón

La idea inicial
es subir al Cogollo de Cebolleo desde el Puerto de las Zreizales, pero de repente surge la idea de variar el recorrido y subir directamente desde donde nos encontramos, por el valle de Buzongo, que desconocemos. Por senda de ganado se va ganando altura y comienzan a aparecer piornos muy cargados de nieve, que van dando la lata, sobre todo teniendo en cuenta de que vamos casi en camiseta y nos choca la nieve contra el abdomen. Poco después, ante un tupido frente arbustivo, optamos por ascender hacia el cordal, por zonas más despejadas. El espesor de nieve comienza a aumentar y la nieve a entrar por la parte alta de las botas ¡qué bien vendrían ahora las polainas! Lo que parecía que iba a ser una corta jornada de montaña se está alargando por esta cantidad de nieve blanda imprevista. En la cuesta final antes de la cumbre del Pico Buzongo el espesor medio es de más de un palmo.


Marietes de Abajo recibe con regocijo los rayos del Sol.

La cumbre, como decía más arriba, es decepcionante. No hay nada de nada, ni un mero poste metálico, aunque si lo hay a cien metros de distancia en uno de los subcollados, el de Cogollo. Un paseo de lado a lado de la collada para tomar fotos y héte aquí que el reloj marca las 12:30. Por exigencias del guión hay que estar en casa para comer y no salen las cuentas con este espesor de nieve blanda. Hay que renunciar al Cogollo de Cebolleo, objetivo del día, y emprender el regreso de inmediato.


Pico Buzongo, en el centro. A la izquierda, el Pico Cogollo y el Collado Cogollo. A la derecha, el Collado Buzongo y la ladera del Cogollo de Cebolleo.

Pero no hay decepción. Es el primer día de pisar nieve este otoño y sólo por las vistas del Cornón y el resto de cimas ha estado entretenido. No hay noticias de que el Cogollo de Cebolleo vaya a cambiar de ubicación, así que ya volveremos.


El Lago Bueno no quiso implicarse en esta nevada. Pero por muy bueno que sea, seguramente no se librará de la próxima.



El Cogollo de Cebolleo asoma detrás del ventisquero de la cumbre del Pico Buzongo.



Mapa extraído de Google Maps con la ruta realizada en trazo rojo. Pulsar en la imagen para ampliar. Lo que aparece en el mapa como Los Rasos es en realidad el Cogollo de Cebolleo, la cima más alta del cordal




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1 comentario:

  1. hola que gusto da encontrar paginas donde se habla de mi pueblo, soy de orallo naciada ahi, ahora vivo en murcia, saludos

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