miércoles, 1 de julio de 2009

Las lagunas de Los Fueyos


Majestuoso, el Catoute (2.112 m.) es la montaña de referencia de la sierra de Gistredo, sin ser la más alta. Las lagunas de Los Fueyos quedarían fuera de la fotografía, a la derecha, a mitad de ladera

La montaña más famosa y retratada de la sierra de Gistredo, que es también -incluso por delante del Cornón-, la más oída del espacio natural Alto Sil, es el Catoute. Su figura es llamativa incluso por su vertiente sur, algo de lo que no pueden presumir la mayoría de las montañas de esta porción de la cordillera. Pero es por el norte por donde llama más la atención, con su dentada arista norte, y sus placas verticales de cuarcita. Todo es relativo, claro, y esta montaña pasaría desapercibida en Somiedo, y apenas atraería una mirada de soslayo si estuviera enclavada en los Picos de Europa. Pero supera en otros atractivos, menos burdos y evidentes, a muchas de las montañas de las dos zonas que acabo de mencionar.


El Catoute y su arista norte desde una de las lagunas de Los Fueyos

Por ejemplo, diría que en su ladera norte se encuentra -según Julio Álvarez Rubio, y no andará desencaminado- la mayor extensión de arandaneras de toda la región. Desde luego, las hay a millones, aunque en un desbroce gigantesco de hace unos pocos años hayan exterminado unos cuantos miles, que afortunadamente ya empiezan a rebrotar. Otro atractivo de esta montaña es que por allí pasa, con mayor o menor frecuencia, el oso pardo, que ya se ha asentado definitivamente en el entorno, encontrándose excrementos suyos incluso a pocos metros de la cima. Y por supuesto, que para ascender a ella, hay que hacerlo desde cuatro poblaciones excepcionales en su belleza, como son Salentinos, Salientes, Primout o Colinas del Campo.


La Fuente de las Chávanas, en la ruta de Salentinos al Catoute, llamada así por las chávanas o llávanas (lajas de piedra) que la forman


La Fuente del Quicio, al inicio de la subida final al Catoute, en la base de Peña Carnicera. Una piedra cóncava canaliza el agua pura y limpia de este manantial, libre de contaminación por el ganado


La Fuente de la Perdiz, otro manantial ligeramente acondicionado para poder obtener agua sin mácula. Se encuentra al otro lado del arroyo, poco más abajo del final de la gigantesca pedriza que rodea el Catoute

En el cordal que parte desde su cumbre hacia el este (hacia Primout), se encuentran lo que para mí son las más claras huellas de circos glaciares de toda la sierra de Gistredo y del Alto Sil. Los glaciares rocosos en la ladera norte del Alto de Calongán, de Fana Rubia, Los Corros, Peña Roguera y La Bobia son espectaculares. Es casi como ver la extensión libre de hielos que se derritieron en el frente del glaciar de la Maladeta (Pirineo de Huesca) en las últimas décadas. Con algo más de vegetación, el aspecto es increíblemente parecido, a pesar de los miles de años transcurridos desde que los glaciares desaparecieron de aquí.


Ya iniciada la subida final, sin tregua, al Catoute. En primer término, un corro abandonado

La ruta más habitual al Catoute quizá sea la que parte de Salentinos, aunque no debe de ganar en número de caminantes por mucho a la que procede de Colinas del Campo. La que viene desde Salentinos es más larga, siendo los primeros kilómetros de suave y paulatino ascenso, que permite ir entonando los músculos y eliminando toxinas. La que sube desde Colinas tiene un primer tramo llano muy corto, otro algo más largo de pendiente moderada, y una demoledora cuesta intermedia que gana de golpe casi toda la altura de la ruta. La arista norte, que se puede hacer procediendo de Salientes, Salentinos o también Colinas, nos permite disfrutar (o morirse de miedo) en sus pasos algo aéreos, y pasar por la cumbre de la más alta y menos conocida Cerneya, así como tener una magnífica visión de las preciosas lagunas de la Rebeza. Otra ruta, más larga y menos usada, es la procedente de Fasgar, en Omaña, a través del Campo de Martín Moro, o de Santiago.


Buscando al oso en la ladera de la Cerneya (2.117 m.), infructuosamente. A saber por dónde andará

Pero hay muchas otras alternativas, como la de subir a Fana Rubia desde los Montes de la Ermita, y desde ahí, en breve, alcanzar la cima del Catoute. O realizar todo el largo cordal a cuyos pies se encuentran los circos glaciares que antes refería, procediendo desde el refugio de El Pedrosillo, encima de Primout. O, también desde Colinas del Campo, abandonar la ruta del Catoute justo antes del tramo duro, y ascender por las lagunas de la Rebeza y la Cerneya, para seguir por la arista norte. En invierno, con algo de ambiente de alta montaña, escalar las canales de su cara noroeste, que no parecen tener más dificultad que el que puede tener un corredor de nieve dura.


Argayo (desprendimiento) desde la arista norte del Catoute. Según Teresa, vecina de Salentinos, ocurrió durante las torrenciales e históricas lluvias de octubre del 2006

Aparte de las lagunas de la Rebeza -no visibles desde ninguna de las dos rutas normales al Catoute- viniendo por la ruta normal que sube desde Salentinos seguramente que todos se habrán fijado en unas pequeñas lagunillas, informes y colmatadas, que quedan varios centenares de metros a un lado del sendero de ascenso. Son las lagunas de Los Fueyos. Una de ellas, la de menor altura, seguramente sería la mayor laguna de toda la sierra -después del Pozo Llao de Montrondo- si no fuera porque el agua, al llegar al centro de ella, se cuela por un misterioso sumidero, para volver a aparecer no se sabe dónde, pero seguramente a bastante distancia de allí.



Mastina montañera en la cima del Catoute


Belén instalado en la cima del Catoute por la Peña Gistredo de Bembibre. No puedo dejar de acordarme de Eloy Gundín, que
padece en estos momentos un cáncer. Eloy ha subido más veces a esta cumbre de las que podrá recordar y es uno de los principales difusores del montañismo en El Bierzo

En una ascensión ordinaria a la cima del Catoute desde Salentinos, decidí, al regreso, visitar estas desconocidas pero hermosísimas lagunas. Para el que venga de otras cordilleras, si espera encontrar lo que habitualmente se ve en Somiedo o en los Pirineos, la decepción será supina. Estas lagunas son más bien charcas, de origen glaciar, que no citaría en este reportaje si sus dimensiones las hubieran hecho ya tan famosas que aparecieran por doquier en internet. Como no aparecen por ningún sitio, y es obligado conocer nuestro patrimonio para poderlo valorar y defender, es por lo que se citan en este blog.


Dos de las tres lagunas de Los Fueyos, como se puede ver, muy colmatadas ya


Peña de Valdiglesia (2.134 m., centro), la montaña más alta de la sierra de Gistredo, desde las desperdigadas pozas de la laguna superior

A la hora de clasificarlas, se podría decir que son cinco lagunas o charcas. Dos de ellas, muy pequeñas, se encuentran separadas del resto, y a mayor altura. Desconozco si estas dos se consideran también como parte del conjunto que se nombra como lagunas de Los Fueyos, aunque tengo la impresión de que no. Las inferiores son fáciles de situar en la última edición del mapa militar, en la hoja de Toreno, donde aparecen como dos pequeños círculos azules en las proximidades de un paraje que aparece como Los Fueyos. Más abajo de ellas estaría la hoya más grande, al pie de una gran morrena frontal después de la cual la montaña comienza una vertiginosa caída hacia el fondo del valle.


A algún montañero, en una ráfaga de viento o un descuido mientras ascendía por nieve dura se le escapó la chaqueta, que terminó en el desagüe de la primera laguna. No, no había restos humanos dentro. Lo blanco es el relleno de la chaqueta, que ha salido al exterior


Paraíso vegetal en la laguna intermedia de Los Fueyos

Desde la más baja de las dos charcas superiores, un arroyo hace de desagüe, y termina aportando agua a la primera de las tres lagunas inferiores, que no aparece en el mapa militar. Desde ésta, muy colmatada y dispersa, el arroyo continúa hacia la siguiente, la más grande, para luego despeñarse en pequeños saltos hacia la última. Ésta, como ya indicaba antes, tiene en su borde inferior una gran morrena central de una de las etapas glaciares de otros tiempos, y está bordeada por un ya casi indefinible corral, muy antiguo, y los restos de un chozo o corro. Viendo el nada despreciable caudal del arroyo que allí llegaba, me extrañaba que aquella última laguna apenas tuviera agua, teniendo en cuenta de que todo alrededor de la laguna son elevaciones y no hay desagüe. Pero en la zona central de la fosa, con un cierto ruido, el agua penetraba claramente entre unas piedras, y desaparecía en el interior de la tierra. Una lástima, porque aquí hay caudal para formar una laguna no ya sólo grande, sino de algunos metros de profundidad.


La hoya donde se encuentra la última laguna, que apenas tiene agua porque se va por un sumidero


Por entre estas piedras blancas se esfuma hacia el interior de la tierra el agua del arroyo que une las tres lagunas con otra charca más arriba

Las lagunas de Los Fueyos, un diminuto paraíso natural.





Mapa extraído de Google Maps con la ruta realizada en trazo rojo. Pulsar en la imagen para ampliar




Mapa global del espacio natural Alto Sil con la ruta realizada en trazo azul. Pulsar en la imagen para ampliar



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6 comentarios:

  1. Si a veces tenemos al lado un monton de cosas que no nos fijamos. Muy guapas las fotos

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  2. Interesante tu blog. He llegado aquí desde el blog "Valles de la tercia y Arbas", y me ha gustado mucho.
    Tu reportaje me ha parecido fascinante,me recuerda mucho a los paseos y rutas que me hago por mi zona.
    El pico "Catoute", se parece bastante al "cueto Millaró" o "Brañacaballos" de 2189m de altura,uno de los mas grandes de la montaña leonesa.
    Este pico corona el pueblo de "millaró" situado en el valle de la "Tercia y Arbas" y el pueblo más alto,a unos 1400m y del que me he atrevido ha hacer un blog.
    Te invito a que poco a poco lo vayas conociendo,ya verás que belleza,aunque también tiene algún "grano en su bonito cristal"....

    Un saludo y estamos en contacto.

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  3. Gracias, Curuxa y Millaró.

    Recuerdo el Brañacaballo, de una vez que lo vi mientras subía al puerto de Piedrafita desde la zona de Valporquero. Tenéis por allí una zona fascinante de montaña que habría que ir mostrando al mundo.

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  4. Estoy encantado de leerte, Alto Sil. Vivo en Degaña y quería comentarte si ves factible la travesía en bici de montaña desde Fasgar a Salientes o viceversa. Saludos.

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  5. Hola: se puede hacer en bicicleta, pero algo más de dos kilómetros los tendrás que hacer con la bici al hombro. Subes desde Fasgar al Collado de Campo, y tomas la pista o camino que sube hacia la derecha, hasta la loma. Seguramente esa pendiente no la puedas hacer tampoco con la bici. En la loma, el camino termina antes de subir a una cota de 2.000 metros, por un sendero que tienes que hacer a pie, con la bici al hombro. Arriba, ya en el límite con Salientes, giras a la derecha, recorres medio kilómetro de cordal hasta el collado de Portilla, justo antes del Tambarón, y bajas hacia Salientes por un sendero. Poco más abajo ya hay camino ciclable.

    Un saludo

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  6. Después de mucho tiempo, por fin he conocido como estos lugares que narras y que leo casi todos los meses. Subí a Catoute y al bajar fuí en busqueda de estas lagunas que te había visto anteriormente este reportaje. La grande, como bien dices, es un buen "chao".
    Espero subir Valdiglesias y Tambarón no tardando mucho.
    Un saludo.

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